LEER A Carmen Martín Gaite
Murió abrazada a sus cuadernos. Cuando la llevaban al hospital, Carmen no sabía que tenía un cáncer de hígado en estado muy avanzado. Al segundo día de su estancia allí, Ana María, su única hermana, regresó para buscar unos papeles a la casa del pueblo madrileño de El Boalo donde ambas habían pasado los últimos meses. Antes de irse, le preguntó: "Carmen, ¿quieres que te traiga algo?". "Mis cuadernos", le respondió ella. Cuando Ana María volvió, su hermana ya estaba muy mal, pero pudo darse cuenta de que se había cumplido su encargo. Cogió los cuadernos y los estrechó entre sus brazos. Fueron su único equipaje para el último viaje.(...)
Al llegar la era informática, las editoriales empezaron a "exigir" a sus autores que entregaran los manuscritos en un disquete. Entonces Carmen compró una de aquelas máquinas digitales a las que siempre llamó las "ordenadoras", porque si eran las sustitutas de las máquinas de escribir, lo más lógico -según ella- era que también heredaran su género gramatical. Pero aquella "ordenadora" nunca traspasó el umbral de la casa de Carmen, no podía profanar aquel santuario de libros y mesas grandes, sino que fue a parar directamente al domicilio de Angelines, su secretaria. Carmen nunca llegó a utilizar la informática para trabajar. "Me sentiría triste si tuviera que escribir directamente ante una pantalla", comentó dos años antes de su muerte. A pesar de que comprendía sus ventajas y sabía que su generalización era imparable, a su edad no le apetecía introducirse en ese complejo mundo de bits y redes. "Siempre ha habido una primera vez -añadió-, en ponerse al teléfono y hablar, o en montarse en un avión. Yo me muevo en el mundo y, claro, evoluciono. No me faltan la curiosidad ni la amplitud de miras; edad de aprender, en cambio, no la tengo ya." Se refería, claro está, al aprendizaje de asuntos técnicos, porque su actitud vital siempre fue muy receptiva a las novedades.(...)
Una de las claves del éxito de sus escritos es su carácter testimonial, su capacidad no solo de reflejar el lenguaje cotidiano, sino de capturarlo en sus múltiples variantes y registros. "En una ocasión -cuenta su hermana-, iba yo con Carmen en el autobús, y una señora se dirigió a ella mostrando su sorpresa por encontrarse a una escritora conocida a su lado:
-Pero, ¡usted es Carmen Martín Gaite!, ¿no?
-Sí -le respondió ella con naturalidad.
-¿Y usted viaja en autobús?
-Señora, ¿usted me lee? -le preguntó Carmen a su vez.
-Sí -le dijo la mujer.
-Entonces, cómo quiere usted que todo lo que yo cuento suceda en otra parte que en la calle. Si no tomo este autobús o el metro, no me entero. Si no entro en los cafés o hablo con los camareros, no podría escribir lo que usted ha leído."
Otra manera de relacionarse con sus lectores era a través de la correspondencia. Carmen recibía cartas de entusiastas que vibraban con su obra y le expresaban su admiración. Responder agradecida a todas esas cartas era para ella una agradable ocupación que procuraba cumplir con prontitud, aunque le llevara no poco tiempo del que nunca andaba sobrada.
Al llegar la era informática, las editoriales empezaron a "exigir" a sus autores que entregaran los manuscritos en un disquete. Entonces Carmen compró una de aquelas máquinas digitales a las que siempre llamó las "ordenadoras", porque si eran las sustitutas de las máquinas de escribir, lo más lógico -según ella- era que también heredaran su género gramatical. Pero aquella "ordenadora" nunca traspasó el umbral de la casa de Carmen, no podía profanar aquel santuario de libros y mesas grandes, sino que fue a parar directamente al domicilio de Angelines, su secretaria. Carmen nunca llegó a utilizar la informática para trabajar. "Me sentiría triste si tuviera que escribir directamente ante una pantalla", comentó dos años antes de su muerte. A pesar de que comprendía sus ventajas y sabía que su generalización era imparable, a su edad no le apetecía introducirse en ese complejo mundo de bits y redes. "Siempre ha habido una primera vez -añadió-, en ponerse al teléfono y hablar, o en montarse en un avión. Yo me muevo en el mundo y, claro, evoluciono. No me faltan la curiosidad ni la amplitud de miras; edad de aprender, en cambio, no la tengo ya." Se refería, claro está, al aprendizaje de asuntos técnicos, porque su actitud vital siempre fue muy receptiva a las novedades.(...)
Una de las claves del éxito de sus escritos es su carácter testimonial, su capacidad no solo de reflejar el lenguaje cotidiano, sino de capturarlo en sus múltiples variantes y registros. "En una ocasión -cuenta su hermana-, iba yo con Carmen en el autobús, y una señora se dirigió a ella mostrando su sorpresa por encontrarse a una escritora conocida a su lado:
-Pero, ¡usted es Carmen Martín Gaite!, ¿no?
-Sí -le respondió ella con naturalidad.
-¿Y usted viaja en autobús?
-Señora, ¿usted me lee? -le preguntó Carmen a su vez.
-Sí -le dijo la mujer.
-Entonces, cómo quiere usted que todo lo que yo cuento suceda en otra parte que en la calle. Si no tomo este autobús o el metro, no me entero. Si no entro en los cafés o hablo con los camareros, no podría escribir lo que usted ha leído."
Otra manera de relacionarse con sus lectores era a través de la correspondencia. Carmen recibía cartas de entusiastas que vibraban con su obra y le expresaban su admiración. Responder agradecida a todas esas cartas era para ella una agradable ocupación que procuraba cumplir con prontitud, aunque le llevara no poco tiempo del que nunca andaba sobrada.
*(Extraído de "Cuando llegan las musas", Raúl Cremades y Angel Esteban, 2002).-
46 comentarios
LeeTamargo -
GRACIAS, AMIGA: LeeTamargo.-
Gemuina -
dejó entonces gran herencia, a aquella viajera, le explico como un escritor se hace, la vida realmente es la que nos enseña en cualquier camino que emprendamos.
Un saludo
LeeTamargo -
LeeTamargo.-
lunaaaaa -
LeeTamargo -
NOS LEEMOS: LeeTamargo.-
Isabel -
LeeTamargo -
LeeTamargo.-
LeeTamargo -
GRACIAS A TI: LeeTamargo.-
LeeTamargo -
TE SALUDO, AMIGA:
LeeTamargo.-
LeeTamargo -
OK, GRACIAS: LeeTamargo.-
LeeTamargo -
GRACIAS A TI: LeeTamargo.-
LeeTamargo -
OK, SALUDOS: LeeTamargo.-
LeeTamargo -
TE SALUDO: LeeTamargo.-
Gatito viejo -
Corazón... -
Con ésta presentación, sí que dan ganas de conocerla mejor. ¿Sabes? yo creo que hay escritores (a) que no podrían escribir algo que no han visto o sentido pues al escribir lo hacen de una manera tan natural y sencilla que llega a la gente.
Claro la escritura es muy extensa y para todo hay gustos así como a ella le gustaba hacerlo de puño y letra, seguramente a otros le gustará hacerlo en una máquina u ordenador. Muchas gracias por la recomendación y la dirección que nos proporcionas.
Saludos.
;o)
noemi -
Un poco como todos los blogueros, digo yo...... ahora no pediremos cuadernos sino ordenadores en el hospital en los lechos de muerte.
rosebud -
Silvia -
Saulo Farrugia -
Pd.: M encanto el texto, y ganas entran de leerla.
Muralla -
Supo escribir y dejar un hermoso legado...
Bicos.
LeeTamargo -
LeeTamargo.-
LeeTamargo -
LeeTamargo.-
LeeTamargo -
SALUDOS, AMIGA:
LeeTamargo.-
LeeTamargo -
LeeTamargo.-
Lyzzie -
Besotes!!
LeeTamargo -
LeeTamargo.-
LeeTamargo -
COMPARTIENDO: LeeTamargo.-
sabbat -
Luunna -
Un abrazo te sigo leyendo
Luunna
mirada -
LeeTamargo -
Habéis empujado hacia mí estas piedras.
Me habéis amurallado
para que me acostumbre
Pero aunque ahora no pueda
ni intente dar un paso,
ni siquiera proyecte fuga alguna,
ya sé que es por allí
por donde quiero ir,
sé por dónde se va.
Mirad, os lo señalo:
por aquella ranura de poniente.
...Resumir el papel de un escritor/a no es fácil y requiere, cuando menos, mayor espacio. Por eso te remito a su página web y espero, al menos, haber contribuído a tu interés, amiga:
http://www.ucm.es/info/especulo/cmgaite/cmg_inde.htm
GRACIAS A TI: LeeTamargo.-
LeeTamargo -
GRACIAS A TI: LeeTamargo.-
LeeTamargo -
SALUDÁNDOTE:
LeeTamargo.-
LeeTamargo -
TE SALUDO: LeeTamargo.-
LeeTamargo -
Sin embargo leer es diferente, sea por circunstancias de tiempo o lugar, la lectura requiere otra amósfera y actitud, al menos para mí...
GRACIAS A TI: LeeTamargo.-
LeeTamargo -
TE SALUDO: LeeTamargo.-
LeeTamargo -
GRACIAS, AMIGA: LeeTamargo.-
Unda -
Un beso
cieloazzul -
que bello leer esto LEE, invita a vivir el mundo de la mano:)
besito
Vir& -
Ahora que al entrar a tu casa, me encuentro tan bien, volveré. Gracias.
Trini -
Abrazos Lee, me gusta aprender en tu página.
juan carlos guerrero -
Magda -
Darilea -
Como dice white que mejor inspiración que la vida en si para escribir, y sobre los ordenadores, yo también encuentro algo frío esto para escribir.
Prefiero escribir a mano y cuando lo tengo bien confeccionado y la hoja esta llena de multiples tachones
y anotaciones pequeñas, entonces si que utilizo el word para guardar.
Besitos Luis.
Pd: Comencé a trabajar hace unas dos semanas y tengo menos tiempo que el de antes pero te sigo de cerca.
Zuriñe -
white -
Saluditos